domingo, 11 de abril de 2010

LOS ATENTADOS SUICIDAS EN LA BALANZA DE LA LEY ISLÁMICA

Pregunta: se ha reportado que no sancionan las misiones suicidas. Buscamos entonces en usted una aclaración sobre el tema.

Respuesta: es bien sabido entre los sabios que no le es permitido a un musulmán suicidarse para librarse de una calamidad financiera, enfermedad dolorosa en fase terminal o de cualquier otra cosa que le suceda. El suicidio para liberarse de este tipo de dificultades es sin lugar a duda prohibido (Haram).
Hay algunos hadiths reportados en Sahih Al-Bukari y Sahih Muslim que relatan que una persona que se quita su propia vida tomando veneno o utilizando cualquier otro método (que lo lleve a su muerte) será castigado por esta misma muerte hasta el Día de la Resurrección.
Algunos sabios dedujeron que la persona que se suicida muere como ateo, porque aquel que comete tal acto siente maldad y desdén hacia su Señor, por las calamidades a las cuales se enfrentó sin paciencia. Sin duda, un (verdadero) musulmán no podría jamás llegar al punto de pensar en un acto tan atroz, y mencionar quitarse la vida. En la mayoría de los casos, el individuo suicida no es un verdadero creyente.
No obstante, es imaginable que un musulmán sea capaz de ser influenciado por una ideología maligna y contagiosa que lo puedan llevar al suicidio. Se puede pensar que tal acto se pueda llevar a cabo. Es por eso que decimos con plena convicción y certeza que aquel (el suicida) no es un verdadero creyente. Eso es parecido al que abandona la oración por Juhoud (el rechazo testarudo) olvidándose de su carácter obligatorio. Pero si se sabe que renegaba de la oración, entonces no debe ser enterrado en un cementerio musulmán. Es igual (condiciones y veredicto) para el suicida . Con más razón si sabemos que su suicidio se debió a su rebeldía y desdén hacia su Señor por los sufrimientos que padeció.
Dirijamos ahora nuestra atención hacia las misiones suicidas. Estas misiones se han vuelto famosas (en el mundo entero) a causa de la práctica japonesa de los Kamikazes. Un hombre lanzaba su avión de guerra hacia un barco americano, matándose a si mismo, pero también a cuantos soldados enemigos podía.
Todas las misiones suicidas de nuestra época no son vistas como reprobables, cuando deben todas ser consideras prohibidas (Haram) Las misiones suicidas pueden ser de los actos que llevan a los que las practican al fuego eterno.
Considerar estas misiones suicidas como un medio de acercarse a Alláh (actos de adoración dignos de alabanzas) matándose hoy por su tierra o su país, decimos no. ¡Estas misiones no son islámicas!
De hecho, digo hoy lo que representa la realidad islámica -no así la realidad buscada por una minoría de activistas musulmanes -que no hay ninguna Jihad en los países islámicos. Ciertamente hay guerras en numerosos países musulmanes, pero no existe ninguna Jihad que sea establecida (específicamente) bajo una bandera islámica ni que sea establecida bajo reglas islámicas. [...]
Que un joven, cegado (por los hechos y por los prejuicios de la guerra) decida sólo -como solemos escucharlo- escalar una montaña y entrar en un sitio fortificado utilizado por judíos y que mate algunos de ellos y que sea matado en la misma ocasión...¿cuál es el beneficio de un tal acto? Tan solo son actos individuales que no tienen ningún resultado positivo que pueda beneficiar al llamado islámico.
Así que decimos a los jóvenes musulmanes: "Protejan sus vidas, con la condición de emplearlas al estudio de su Din y de su Islam. Sean concientes de ello y actúen conforme a sus mejores capacidades".
Este tipo de acciones y de actos, lentos y aburridos como puedan parecer, son lo que dan el fruto deseado de todos los musulmanes, independientemente de sus diferentes ideologías y metodologías. Todos están de acuerdo en que el Islam debe ser lo que empleemos para gobernar, pero difieren en el camino a seguir (hacia este objetivo).
Ciertamente la mejor guía es la guía de Mohammed.


Fuente: (próximamente) "Al-Masjid Al-Aqsa-El camino hacia la liberación".
Tomado del sitio www.al-manhaj.com -
Traducido al francés por los Salafis del Este.
Traducido del francés al español por: Carryne Antoine Frederica Laviolette.
Para: http://www.islammexico.net